Puede sonar un poco ilógico, o medio loco.
Pero si es verdad, desde que te fuiste de mi vida todo cambio.
Antes todo tenía sentido, tenía ganas de estudiar, de ir al liceo, de ensayar, del inglés sólo para que las agujas del reloj pasen completamente rápido para poder hablar contigo.
Todo era más hermoso, las mañana con frío, el levantarse temprano y ponerse el uniforme. El dialogar con seis profesores distintos, mi aptitud en clase. El estar siempre atenta ante cualquier comentario del profesor, el subir las notas, el estudio de todos los días, todo eso se hacia más lindo o yo sentía eso. Tenía ganas de sonreir todo el tiempo, de no estar pensando sólo en los problemas, si no en algo lindo como eras vos.
Siento que ahora las horas pasan lento, ya no tengo ganas de levantarme temprano y vestir de unfirome salir a tomar el ómnibus y dirigirme a una institución; donde ya no tengo ganas de verle la cara a seis profesores diferentes en el día. En donde la imágen de nosotros me parace constantemente, ya no quiero estar sentada en un banco agarrándo frío; ni tener que mirar y escuchar las boludeses que dicen 35 personas alrededor mío. Ya no quiero sonreír todo el tiempo, ya no quiero intercambiar palabras con nadie, ya no quiero abrir la agenda y que en cada hoja aparezcas vos. Ya a las cosas no le encuentro sentido ninguno, mi vida tiene que tomar un nuevo rumbo. Un rumbo en el que por ahora, no vuelves aparecer....